Bar La Cochera - Alcalá de Guadaíra, Sevilla

Juan M.

Es un bar pequeñito pero sorprende por la calidad de las tapas que sirve. De hecho, ganó una estrella Michelín en 2019 por su buen hacer. Y a pesar de todo, los precios son normales para lo que hay en Alcalá. Muy recomendable, pero hay que ¿reservar? o ir a buena hora. Otro bar más que se suma a la gran oferta gastronómica de Alcalá.

Jorge R.

Fuimos a comer 4 personas sin reserva, recomiendo reservar. La comida espectacular. Lastima que hiciera ese viento que nos daba.
Es un local que no te esperas y te sorprende para bien y mucho.
Esperaba la cuenta mucho más alta de lo que nos cobraron con todo lo que pedimos.
El flamenquin fuera de carta era para dos personas y estar lleno y aun así pedimos un mix de tapas.

Mª T. F. C.

Tapas muy bien elaboradas y con un buen sabor.
La atención es muy buena y el servicio es rápido.
El ambiente es un poco ruidoso por la música y por los comensales, al ser un restaurante con una sala pequeña todos estamos muy juntos.
Algo que no nos gusto, porque nos pareció excesivo es el precio de la Coca-cola, 2,50€ y no era siquiera 33cl.
El postre también fue un poco caro (7€), caro para la competencia en Alcaclá donde los postres no suelen tener esos precios.

Lara R.

Me ha parecido un gran descubrimiento, la carta variada y con mucha calidad y el servicio fantástico, volveré seguro!!!!.

Maria Q.

Nunca habíamos ido y la verdad es que nos gustó mucho la calidad precio del bar. Todo estaba buenísimo, sobre todo nos gustó mucho la torrija de foie, esta impresionante, aunque todo estaba muy bueno. Se nota que el producto era de calidad

Nos gustó mucho la decoración del bar y la presentación de los platos, se notaba que habia un gran trabajo. Lo único que no nos gustó fue que tardaron mucho en traernos la bebida y apenas había clientes, además la torrija tardó bastante en servirla, a pesar de haberlo pedido todo a la vez. Aún así lo bueno que estaba mereció la pena.

Marina R.

Un sitio con bastante encanto. Consejo que reservéis antes de ir porque aunque tiene mesas fuera hay pocas mesas altas dentro del local. El servicio de camareros son todos muy atentos y te van quitando platos y hemos tardado poco en que nos sirvan de primeras y cuando van llegando los platos.
Las mesas que hay dentro del local son mesas altas y las que están fuera son mesas bajas. Hay bastante aparcamiento a su alrededor.
La comida ha sido un espectáculo, hemos pedido una ración de variado de croquetas que estaban riquísimas, una empanada criolla que tenía mucho sabor con los tomates secos, pan de pita con chistorra increíbles.
Volveremos a comer más tapas diferentes

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Fuimos 4 comensales para almorzar. Hicimos previamente reserva y nos pusieron la mesa dentro, pero pudimos cambiarla afuera. Un detalle que agradecimos.
Pedimos tapas y un plato para compartir, todo estaba delicioso. Se observa la buena relación calidad-precio. El bar es pequeño pero han sabido aprovechar bien el espacio con mesas altas. Una persona que utilice silla de ruedas deberá ocupar las mesas de fuera. Los baños son estrechos y pequeños. Las indicaciones de Google Maps fueron correctas.
Muestro fotos.

David

Es un bar pequeñito y bien decorado con 6 mesas altas dentro y 6 mesas fuera. La comida está buena. Pedimos las taleguillas de morcilla (no son muy intensas), el atún frito con salmorejo y la torrija con hígado (muy buenos) un flamenquin gigante y el solomillo a la cochera (se dejan comer sin ser algo espectacular).
En general bien la experiencia aunque muy chiquito el local para ir más de 6