-Salt del Molí - Vidrà, Girona

Fran A.

Fantástica experiencia bajar hasta el Salt del Molí. La ruta es fácil desde Vidrà, pero es ideal hacerlo después de episodio intenso de lluvia, cosa que hace un poco más difícil la bajada, ya que el suelo está algo resbaladizo, especialmente para niños o personas con dificultat de movimiento. Es ideal hacerla circular, pero para ello hay que cruzar el río, justo a la altura de la cascada…y dependerá de la cantidad de agua que caiga.

Veinticinco M. P.

El Salt del Molí es una de esas joyas naturales que combinan accesibilidad con belleza paisajística. Ubicado en Vidrà, este salto de agua de aproximadamente 20 metros de altura forma parte del río Ges y es un destino perfecto para una escapada de senderismo sin grandes exigencias físicas.

El recorrido hasta la cascada es de unos 45 minutos de ida y otros tantos de vuelta, sumando alrededor de 6 kilómetros en total. La ruta es sencilla y transcurre entre bosques de hayas y robles, lo que la convierte en una caminata muy agradable, especialmente en otoño, cuando los colores ocres del paisaje crean una estampa espectacular. En el camino, se cruza el puente románico de Salgueda, una estructura histórica que añade un toque medieval al recorrido.

Al llegar al Salt del Molí, el sonido del agua cayendo y la paz del entorno invitan a hacer una pausa. Dependiendo de la época del año y las lluvias recientes, el caudal de la cascada puede variar, pero incluso en momentos de menor agua, el lugar mantiene su encanto. Es un sitio ideal para tomar fotos, relajarse o incluso refrescarse en verano.

Para quienes busquen completar la jornada, la zona ofrece otras rutas de senderismo que se pueden enlazar con esta excursión, como el camino hacia el Santuario de Bellmunt o el recorrido hasta el Salt del Mir.

En definitiva, el Salt del Molí es una excursión perfecta para desconectar de la rutina, disfrutar de la naturaleza sin prisas y descubrir uno de los rincones más pintorescos de la comarca de Osona.

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Lidia D. L. O.

Hay distintas rutas para llegar a salto del Molí. Nosotros veníamos de la ermita de Beñlmunt. Tuvimos la gran suerte que la semana anterior había llovido y encontramos que el salto estaba precioso y había agua. Estuvimos más de una hora contemplando esta maravilla y disfrutando de este espacio natural desde su base. Cuando volvimos a retomar el camino, cruzamos el río y empezamos a subir para dirigirnos al punto más alto de la cascada y seguir disfrutando de lasgorges que nos ofrece el río Ges dirección Vidrà.

Juan J. M. P.

Una excursión de una buena dificultad para gente no iniciada en senderismo, no aconsejable a gente con dolores de rodillas o alguna minusvalía.
Saliendo desde Vidrà podemos ir por el camping o por la depuradora.
Yo fui por la depuradora, pasamos por una granja y seguimos camino de la depuradora al llegar a ella encontraremos un cabré plastificado de color azul y que es abatible (no tocar fuera de lo plastificado que da calambre) y seguimos casi un km donde veremos a nuestra izquierda un sendero que hay una puerta metálica, tenemos que pasar por allí y seguir el camino y las indicaciones para llegar al Salt del Moli, es tramo rompepiernas por sus piedras pero con un buen calzado se pasa bien.
Llegaremos a una bifurcación y podemos escoger el camino de la derecha más largo pero más sencillo y el de la izquierda más corto pero más empinado, por suerte para llegar al salto es de bajada y ya desde allí al Molino antiguo que está en ruinas y a unos 500 metros el puente de piedra, cruzamos el puente y seguimos subiendo ahora un poco para llegar a la cima de la cascada, seguimos por la izquierda entre las ruinas del antiguo molino y bajamos hasta el salto

Carmen C.

Ruta moderada con algunos tramos complicados para personas mayores si lo haces por el lado largo. La ruta es circular, pero puedes hacerla perfectamente por el mismo sitio para ir o volver. Nosotros fuimos por el sitio largo que es casi todo el tiempo de bajada y empieza al lado de camping. Puedes volver por el mismo sitio o cuando llegas a la cascada hay unas pilotas que puedes cruzar sin problema y vuelves por el otro lado que es un poco más corto y más llano, es como una carretera forestar, aunque al principio hay algún tramo de subida por montaña. Por la ruta larga te encuentras un puente romano muy chulo. La catarata es muy bonita y el agua estaba helada.
Recomiendo para pasar un día en familia en la naturaleza.

Tania A.

Increíble lugar para pasar una experiencia maravillosa llevar calzado cómodo ya que se tiene que caminar unos 40 minutos desde donde se deja el coche hasta llegar a la cascada no lleves mascotas dado q es complicado acceder al igual q con niños

S

Buena ruta. Hay dos caminos para escoger. Desde Vidrà, justo delante de la Escuela pública, hay un camino de tierra que cruza unas granjas. Con este camino ancho de tierra llegáis directos al Salt del Molí. No tiene pérdida: todo hacía abajo por el camino hasta que un rotulo indique que os tenéis que adentrar en la zona boscosa: ahí hay una bajada con piedras y llegais en 5-7minutos al Salt del molí. La otra ruta empieza paralela al Camping de Vidrà; es más complicadilla (poco) y larga, ya que desde un principio es sendero bosque a través, aunque de camino hay varios puentes y sitios de interés antes de llegar a Salt del Molí. Además hay mucha más sombra. Obviamente, si queréis podéis hacer ambas rutas; bajar por una y salir por la otra.

Ruben S.

Lugar mágico! Espectacular! Se puede nadar un poco si no hay gente, y es muy tranquilo. El paseo para llegar no es muy largo ni muy complicador (fácil para niños). De los mejores saltos o gorgs de la zona.
Se puede aparcar gratis en las calles de Vidrà, justo antes de empezar el camino.